Un hecho imponible es la situación que establece el nacimiento de un impuesto.
Un hecho imponible es la situación que establece el nacimiento de un impuesto.
¿Qué es un hecho imponible?
La verdad es que hemos reducido la definición de un hecho imponible a una frase muy simple para que se entienda, pero también podemos ofrecerte una definición más detallada y técnica, tal y como refleja el artículo 20 de la ley general tributaria: “El hecho imponible es el presupuesto fijado por la ley para configurar cada tributo y cuya realización origina el nacimiento de la obligación tributaria principal”. No somos muy fans de las definiciones oficiales, pero hay que reconocer que en este caso es, sorprendentemente, comprensible.
Un hecho imponible es un concepto muy abstracto, pero es importante porque ayuda a identificar al impuesto y marca el origen del mismo. De hecho, podemos decir que cada hecho imponible de un impuesto tiene cuatro vertientes: objetiva, subjetiva, espacial y temporal.
- La vertiente objetiva, es lo que sucede, es decir, lo que determina la creación y obligación del pago de dicho impuesto.
- La vertiente subjetiva, es a quién le sucede. Es decir, quién está sujeto a pagar dicho impuesto.
- La espacial, el hecho imponible marca dónde se determina el impuesto. Es decir, si es de carácter internacional, nacional o autonómico.
- Y en el ámbito temporal, el hecho imponible indica cuándo nace la obligación tributaria y el momento en el que los contribuyentes están obligados a pagarlo.
El hecho imponible en el IVA
En este caso, el hecho imponible en el IVA se origina cuando se dan estas tres circunstancias: (1) la prestación de un servicio o la entrega de un bien, (2) la adquisición de bienes y (3) la importación de bienes.
¿Y cómo se compone el hecho imponible del IVA? Como ya hemos comentado anteriormente, los hechos imponibles tienen 4 vertientes: objetiva, subjetiva, espacial y temporal. En el IVA serían las siguientes:
- Objetiva: la entrega del bien o servicio.
- Subjetiva: Que esa entrega del bien o servicio sea realizada por un profesional.
- Espacial: que esa entrega se realice dentro del territorio del impuesto.
- Temporal: siempre que se realice durante el ejercicio de una actividad profesional o empresarial.
El hecho imponible en el IRPF
En el IRPF, el hecho imponible está constituido por los rendimientos del trabajo (lo que has ganado trabajando, vaya), las ganancias y pérdidas patrimoniales, los rendimientos de capital y actividades económicas y las imputaciones de renta que se establezcan por ley.
Y si lo dividimos en cuatro partes como hicimos anteriormente con el IVA, las partes del hecho imponible serían:
- Objetiva: la obtención de ingresos.
- Subjetiva: el sujeto pasivo. Es decir, cualquier contribuyente que esté obligado a presentar la declaración de la renta.
- Espacial: el territorio nacional.
- Temporal: el último día del periodo impositivo, que generalmente suele ser el 31 de diciembre.
Ejemplos
Son muy básicos y sencillos de comprender, ya verás. En el IVA sería cualquier compra en el súper, en la librería o en cualquier tienda donde adquieras productos, que esperamos que sean a buen precio porque la inflación no perdona.
Y en cuando al IRPF, el ejemplo más claro es la nómina.
Si nos salimos de los dos impuestos más famosos y a los que hemos dedicado más palabras, podemos centrarnos en el Impuesto de Sociedades. En este caso, el ejemplo sería la propia constitución de la empresa.