No me interesa hacerla con expertos
Si necesitas calcular el IVA correspondiente al facturar como autónomo a tus clientes, en este artículo te explicamos cómo puedes hacerlo y cómo usar nuestra calculadora de IVA.
Qué es el IVA y cómo funciona
Antes de entrar en materia, vamos a explicar qué es el IVA. Su nombre completo es el Impuesto sobre el Valor Añadido, y se trata de un impuesto indirecto que grava el consumo de los bienes y servicios.
Que sea indirecto quiere decir que se aplica sin tener en cuenta la capacidad económica de las personas, es igual para todo el mundo, y no repercute sobre la renta de las personas, sino sobre el consumo.
Lo que hace el IVA es aumentar mediante un porcentaje concreto el precio del artículo o servicio que se adquiere. En España, el IVA general es del 21%, aunque también está el IVA reducido (10%) y el IVA superreducido (4%).
El objetivo de este impuesto es el de gravar las entregas de bienes y prestaciones de servicios que hacen los empresarios y los profesionales, las adquisiciones intracomunitarias y las importaciones de bienes.
En el caso de los empresarios y autónomos, tienen que repercutir el IVA a quienes comprar el bien o servicio, y posteriormente ingresarlo a la Administración. Es decir, como autónomo, tendrás que ser el recaudador del IVA. Este dinero nunca va a ser parte de tus beneficios, ya que cada trimestre tendrás que pagarlo a Hacienda.
Cómo calcular el IVA
Para calcular el precio total de IVA, según el porcentaje general, es decir, el del 21%, tendremos que dividir el precio original entre 1,21. Si queremos hacerlo por el IVA reducido (10%) tendremos que hacerlo entre 1,10. Y para el superreducido (4%) será entre 1,04.
Al hacer las facturas tienes que indicar el precio exacto de IVA que corresponde al bien o servicio. Por ejemplo, vendes un servicio que vale 1000€ a otra persona autónoma.
Como entre autónomos las facturas se suelen hacer sin IVA, el precio final del servicio se calcularía multiplicando 1000€ x 1,21€ = 1210€. Este será el precio del producto final.
En el caso de que lo ofrezcas a un consumidor final, el precio final ya tendrá el IVA incluido. Sin embargo, cuando vayas a hacer la contabilidad de tu negocio, sí que tendrás que identificar ese IVA incluido, por lo que tendrás que sacar el IVA del precio final.
Esto se hace primero sacando la base imponible del producto, dividiendo el precio al consumidor entre 1,21: 1000/1.21 = base imponible.
Cuando tienes la base imponible, hay que restar el precio al consumir menos esa base imponible, y te dará el IVA incluido. Es decir:
1000/1,21 = 826,45€ es la base imponible.
1000 - 826,45 = 173,55€ es el IVA.
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Si estos cálculos te parecen algo complicados, te echamos una mano gracias a nuestro servicio para autónomos. Porque podrás tener tu propio portal para llevar tu contabilidad y tus facturas al día, sin preocuparte por nada. Y si necesitas asesoramiento, nuestros expertos fiscales podrán ocuparse de todas las dudas que tengas.
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