Es un intercambio de algo entre dos partes, del que no tendrás que pagar impuestos por ello.
Es un intercambio de algo entre dos partes, del que no tendrás que pagar impuestos por ello.
¿Qué se considera una transmisión lucrativa?
En las transmisiones lucrativas únicamente existe un intercambio por una de las partes, sin recibir la otra nada a cambio. Lo que podemos considerar que es una donación, herencias o regalo, vaya.
Esto se suelen aplicar impuestos como:
- el de Sucesiones y Donaciones
- o el de Actos Jurídicos Documentados
- o el Impuesto sobre el Incremento de Valor de los Terrenos de Naturaleza Urbana, si el bien transferido es un inmueble.
Diferencias entre trasmisiones lucrativas y onerosas
Como hemos visto, en las transmisiones lucrativas únicamente existe un intercambio por una de las partes, sin recibir la otra nada a cambio.
En cambio, en las transmisiones onerosas son cuando unas partes se traspasan un bien, ya sea dinero o patrimonio, a cambio de bienes o derechos. El claro ejemplo es una compraventa. Y por esa transmisión hay que pagar ciertos impuestos y tener una valoración de ese “algo” que se traspasa. Para todo ello, se necesita tener el valor de transmisión y de adquisición.
Además, en este mismo sentido, en las transmisiones onerosas, se paga un impuesto que se conoce con el nombre de Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales (ITP). El valor del ITP varía en función de la Comunidad Autónoma en la que se encuentre el bien en cuestión o donde resida la persona que traspasa, si se trata de otro tipo.
Ha sido sencillo de entender, ¿verdad?
De todos modos, si tienes alguna duda, puedes consultarnos sin ningún problema y te explicamos la relevancia fiscal que tiene cada una de estas transmisiones. Sean lucrativas u onerosas.